"Siempre vemos, eso sí, claro, los colores, a veces sólo turbonadas de colores luchando de forma despiadada, tal que personajes de una tragedia de Shakespeare convertidos en marionetas por los pinceles (...) Colores o su ausencia sin contexto. La pintura de Silvia Anel carece, así, de contexto: sólo hay que verla por lo que tiene de visible, "y lo demás es silencio", como decía Hamlet camino del éxitus. Exit. Salida".